Del 15 al 28 de mayo
Lunes a sábado de 10 a 20hs
Entrada libre y gratuita.
Riobamba 750.
Más información: info@objeto-a.com.ar

AySA participará activamente de la celebración del Bicentenario a través distintas actividades, desde el 15 de mayo, fecha en la que se celebra el Día del Trabajador Sanitarista, hasta el 28 de mayo, relacionadas con el pasado, presente y futuro del Agua y el Saneamiento en nuestro país.
En un momento tan significativo de la historia argentina, la empresa acompañará los festejos con actividades que, promuevan el conocimiento, impulsen una visión dinámica y estimulen el debate en torno a estos servicios fundamentales.
Durante 14 días se desarrollarán actividades que incluirán exposiciones, muestras, ciclos de cine, exhibiciones de libros y documentos históricos, realización de publicaciones, visitas y actividades para niños. Es en este contexto que Objeto a está coordinando una muestra que tendrá lugar en el Palacio de Aguas, edificio emblémático tanto de la institución como de la historia de nuestro pais...

Agua, según Thales de Mileto, arché (arjé) principio y origen de todas las cosas.
Agua-vida, agua-madre, nutre, acaricia, sostiene; agua-alimento, savia-sangre que recorre generosa los campos; agua-cobijo, agua-abrazo, tejiendo paciente una red con hilos de ríos con mantas de mares y océanos acuna y viste la tierra uniendo continentes y pueblos.
Agua, elemento vital y musa inspiradora, como realidad y metáfora será el eje de la presente muestra que llevara al visitante a transitar distintas sensaciones y emociones a través de dos recorridos donde arte, ciencia, tecnología y poética tendrán un denominador común, tomar conciencia del significado profundo escondido en la transparencia del agua, en una época donde las riquezas naturales están en riesgo ante el mal uso y la indiferencia del hombre, el arte parece ser el instrumento llamado a producir despertares.
Instalaciones, esculturas y objetos hídrico-lumínicos, fotografía digital, pintura sobre telas, son parte de las diversas obras de arte contemporáneo que los conforman culminando con una de las obras distintivas del Maestro Gyula Kosice.
En uno de los recorridos, se esconden silenciosas, antiguas historias recogidas y guardadas celosamente entre bateas y tablas de lavar por aquellas lavanderas a las que pertenecieron, más allá como al descuido cuelgan las telas plenas de mares, cielos y soles de las sogas de un gran tender, el agua limpia y purifica, el agua une y guarda secretos…también tiene mensajes como una partitura a ser descifrada, que se escribe una y otra vez para que aprendamos a escucharla, respetarla, compartirla, cuidarla.
Desde la pantalla imágenes casi mágicas dejan entrever el ritual camino en la búsqueda del agua, enfrente, cables-tubos-caños, agua que corre y recorre, los tiempos cambian, la tecnología avanza, el agua siempre el agua…
Y el agua siempre en movimiento se congela en remolinos de burbujas, contenida y continente, metáfora de vida, en las imágenes fotográficas que cierran este recorrido.
En el otro recorrido, pasado presente y futuro entablan un diálogo donde lo metafórico se corporiza, una antiquísima medidora de presión de agua enfrenta inmutable un cielo metálico de donde una llovizna cae incesantemente, lo artificial y lo natural entablan una relación dialéctica donde la naturaleza prevalece siempre “en el centro de nuestra mirada”.
Esa naturaleza que se entrama y fusiona con la tecnología a través del arte, pariendo en esta ocasión dos esculturas tecnológicas donde el agua fluye intangible, mostrando imágenes del devenir, de lo que transcurre, vibra, con la fuerza de la naturaleza de los ríos de montaña chocando con las rocas y con la recreación de la tecnología, sustancias líquidas vibrando al ritmo de patterns sonoros en un “eterno retorno”.
Hacia el final del recorrido entre penumbras nos deslumbra un cono de luz blanca, allí unos seres irreales, mitad humanos, realizan incansables entre colores imposibles una danza submarina, quizás celebrando el origen de la vida, quizás invitando a las profundidades del océano donde éste se esconde. Realidad y fantasía, la magia del agua…de la vida.
Cerrando y aunando ambos recorridos, principio y futuro, naturaleza, ciencia y tecnología confluyen en una gota de agua que resume en su sencillez la complejidad del infinito… “Una gota de agua acunada a toda velocidad nos ha creado. La tierra brotada de una gota de fuego solar, pudo apagarse a tiempo gracias al movimiento estático en el espacio, que contribuyo a dar vida a la vida. Desde ese momento, la pendiente de la nada ensaya naturalizarse contra corriente”. Poema Hidráulico – Kosice.

La imagen del cabezal corresponde a un detalle de la instalación-in-site-specific de Magma